La Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (Cujae) ha logrado fortalecer sus vínculos con el sector productivo y de servicios mediante la creación de la Sociedad de Interfaz de Ciencia y Tecnología (CETA S.A.) en agosto de 2020. Esta empresa tiene como objetivo principal gestionar proyectos de transferencia e innovación solicitados por el sector empresarial, así como aquellos asociados a programas emprendidos por la propia empresa.
La doctora en Ciencias, Danae Pigueiras Otero, directora de CETA S.A., explicó que los proyectos desarrollados en esta institución se relacionan con diversas áreas de la ingeniería, la arquitectura y otras especialidades. Además, ha promovido la creación de proyectos en sectores estratégicos de la economía cubana, como la construcción, la industria electroenergética, las telecomunicaciones, la informática, el turismo, la producción de alimentos, la industria biotecnológica y farmacéutica, así como los servicios técnico-profesionales.
Los proyectos gestionados por CETA S.A. se dividen en dos categorías: aquellos asociados a programas nacionales, sectoriales y territoriales, y los de transferencia e innovación solicitados por el sector productivo y de servicios, que incluyen servicios científico-técnicos, consultorías y capacitación profesional.
Pigueiras Otero destacó que, si bien siempre ha existido una relación entre la universidad y el sector productivo y de servicios, la creación de CETA S.A. ha fortalecido este vínculo y ha propiciado un cambio necesario. La empresa se enfoca en establecer un canal de transferencia e innovación en dos direcciones.
En primer lugar, hacia los equipos de trabajo de la universidad, brindando apoyo en el diseño y gestión de proyectos, el desarrollo de nuevos productos y servicios, la búsqueda de financiamiento y el fomento de una cultura de la innovación basada en la integración empresa-universidad. Además, se orienta la investigación hacia los problemas y requerimientos de la actividad económica.
En segundo lugar, hacia el sector productivo y de servicios, identificando y canalizando sus necesidades, facilitando la introducción de la ciencia y la transferencia de tecnologías en la resolución de problemas, y proporcionando asesoría y capacitación profesional que promuevan un cambio de mentalidad hacia la innovación.
Entre los beneficios para estudiantes y profesores de la Cujae, la directora de CETA S.A. señaló que la empresa ha creado condiciones para financiar nuevos proyectos, remunerar a los participantes, desarrollar infraestructuras para el desarrollo científico, facilitar el acceso a otras tecnologías y aplicar los resultados de investigaciones.
La sociedad colabora con empresas como Servibasica (del Ministerio de Energía y Minas), Etecsa, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, BioCubaFarma, Azcuba, el Grupo de la Informática y las Comunicaciones (GEIC) y otras entidades.
CETA S.A. ha desarrollado una amplia cartera de proyectos que se han materializado en bienes y servicios. Entre ellos se encuentran el sistema de edificaciones residenciales de mortero armado prefabricado (Sermap), que ha generado prototipos para su exportación a México y tiene posibilidades de generalización en el país. También se destaca la fabricación y validación de un pluviógrafo en colaboración con el Instituto de Recursos Hidráulicos, la implementación del sistema para la gestión universitaria (Sigenu) en todo el país, y consultorías a empresas extranjeras.
Pigueiras Otero afirmó que estos proyectos son de gran importancia, ya que ponen el conocimiento de la universidad al servicio de las actividades productivas y de servicios para el desarrollo de la sociedad. La forma de trabajo implementada tiene efectos a corto plazo en la eficiencia y mejora de los procesos.
Con información de Cubadebate